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Barcelona, Spain


1618, Gama benzeno, Leonardo Gama (Bogota, Colombia 1974) Diseñador grafico que ha explorado el comic, la ilustración, la pintura y la ambientación de espacios. Su plástica tiene la capacidad de impregnarlo todo con un extraño sentido de lo ficticio, lo bizarro, posthumano y Cyborg. Influenciado por el pop, el porno, los superhéroes, la biotecnología y el arte óptico-cinético, busca despolarizar y exorcizar ciertos tópicos, reivindicando lo que la sociedad puede entender como cutre y desarrollando la cultura trash mediante la búsqueda de la belleza. Su obra capta trazas de los momentums sexuales para así descorporizarlos, sobresaturando cromáticamente la hiperrealidad literal y plastificándolos con un descaro de voyeurista freak que pone en evidencia su condición de amante de las extravaganzas. Apuntando a una cohesión entre la energía de la pintura y el material mismo del trabajo, establece un dialogo entre el sexo tópico, el hardcore underground, el mainstream underground y el pop en si mismo, como formato visual de explosión estática.

Alex Brahim para la revista AB (Barcelona-España 2004)




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Foto: Adriana Salazar

8/30/2009

Como la muerte encontro al sol...


A Jenna, que me dejo loco por un buen tiempo...

Yo sumergido en acido lisérgico, entre la decadencia de la literatura y el fresco abandono. Esperando. Mi cerebro funcionaba de manera extraña gracias a una recepción de luz más fuerte de la habitual. Pupilas dilatadas. George Orwell había muerto en medio de botellas vacías de Xibeca y homeless mutantes. Con retraso, llego el recuerdo.
No había sol, yo era el sol encandilado de luz lunar como reflejo turbio de un espejo antiguo y primigenio. Un rayo de sol enseño el amor, pero ahora era de noche, todo había cambiado para bien o para mal, perfecto ambiente para hurgar en lo mas hondo, en donde el recuerdo aparece bajo una turbia invitación para limpiar lo que hace falta. Ya no se puede enseñar nada.
Camine contigo, tu encontrando o tal vez perdiendo, yo perdido mirando, buscando el menor resquicio para encontrar. Pintamos de negro el día y la noche de blanco, con cerveza y marihuana nos inspiramos. Recorrimos lo antiguo y lo nuevo y desciframos los símbolos por medio del color, como dos niños dibujando el mito de la caverna, para que después de mucho caminar entráramos en ella.
Contacto con otra dimensión, con el mundo que hay en otros mundos, o todo lo contrario, ya no lo se… antes, después, siempre… tal vez nunca.
Ya no era acido lisérgico, fresco abandono o literatura en decadencia, ahora los fantasmas cobraban vida mientras se evitaba el moribundo orgasmo, contagiándose todo con una enfermedad del amor. En la oscuridad tanteamos, tonteamos, como dos vampiros en decadencia para que la noche absorbiera la poca luz, el poco blanco que habíamos pintado con astucia adolescente para así entrar en las tinieblas del inconsciente mas profundo, la torpeza que nos dio la madurez y el sueño no recordado.
Paso el tiempo sin memoria, la piel sin tacto y llego el discurso, la parafernalia azul-negra y fantasmal de la luna llena “Full of grace” inundando de energía al sol inmaculado, de licantropía y realidad convulsa. Otra vez, llego el recuerdo a mi encuentro como si yo lo pidiera desde lo más profundo. Pero esta vez había un matiz diferente, el sol no era sol y la luna ya no era luna y tal vez ella no estaba llena “Empty of grace”. Llego la esquizofrenia del pasado, la tristeza del presente y a su vez, en el futuro, la invencible muerte encontró al sol… Galileo tal vez ya lo intuía al mirar de frente al paternal astro, tenia 301 ideas pero no supo cual era la 302, se encandilo quedándose tal vez ciego. Yo a diferencia de el, no pensé mas y me deje envolver por la intuición, lo que por huevos tenia que hacer. Mi mente y mi corazón se pusieron en blanco, salvo mis ojos. Abrí otra lata de cerveza, cogí el primer metro del día cuando los primeros rayos de luz despuntan en la mañana, y me fui a casa cabreado.

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